Que el centro está en crisis todos lo sabemos; lo vivimos y lo sufrimos. A pedazos se caen las pocas construcciones que valen la pena. La gente deja de vivir en la zona, para mudarse a otras partes más seguras y con menos problemas sociales.
Siempre me gustaron los anuncios de grandes tipografías huecas, muy de mitad del siglo XX, sobre los edificios; quedan pocos, entre terregales apocalípticos, demoliciones y maxi-mantas publicitarias de vinil nos llegan muy contados ejemplos.
1 comentario:
Hola.
Justo fuera de esa BOTICA perdió la vida chumina.
Solo pasé a presumir mi nueva cuenta
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